lunes, 20 de septiembre de 2010

Y si algún día se van…

"Yo lloro debajo de mi nombre.
Yo agito pañuelos en la noche
y barcos sedientos de realidad
bailan conmigo."

fragmento de"La Jaula"
en Las aventuras perdidas
Alejandra Pizarnik

Estos días andaba triste, quizás porque la alumna le dijo que se tenía que dar quimioterapia y eso la llevó al pasado, a todo lo que ya creía olvidado. Y a veces se veía a ella misma desorbitada, con la boca áspera y la lentitud de un dolor insoportable. Pero lo que más le preocupaba era el recuerdo de esa mirada, su propia mirada perdida, agobiada después de cada sesión.

Para despejarse se fue caminando despacio desde el trabajo, sabía que se le iba a ir el tren rápido pero decidió que ese día lo iba a perder. Llegó hasta la plaza del Congreso y vio un conjunto de puestos, era una feria de pueblos originarios con todo tipo de objetos artesanales. Hubo algo que le llamó la atención, una especie de muñequita chiquita hecha en tela, con muchos colores, preguntó si era un prendedor pero le dijeron que se trataba de un quitapenas.





6 comentarios:

  1. Es una de las primeras crónicas que te leo y en donde siento mucha tristeza, Virginia. El epígrafe de Alejandra me mató. El encuentro con la muñequita me pareció obra del universo...como dice el dicho: "Dios aprieta pero no ahorca".

    Un placer como siempre.

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  2. Hola Virginia:

    Especial ésta Crónica.

    La figura de "dejar ir el tren" de ésa forma dicha, es muy particular. Como el "quitapenas".
    No me dió tristeza, sino certeza de cuando algo debe ser.
    Perfecto el epígrafe. Impecable la crónica.

    Me deja como (un dicho que dicen es de Lugones) "el temor de lo demasiado tarde".

    Te felicito.
    D

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  3. Vir, una amiga transita esa paradoja de la vida, en la que te intoxican para tratar de curarte, te hacen doler en procura de evitar futuras molestias. Ojalá consiga un quitapenas para llevarle y ella, en el futuro, tenga, como la docente, solo recuerdos. (volví, eh!)

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  4. Verónica: Lamento lo de la tristeza y Alejandra tienen esos poemas que a uno lo dejan sin aliento. Totalmente, un encuentro nada casual.
    Un abrazo y gracias por pasar

    Crónicas: ¡Muchas gracias! Me gustó lo de certeza y temor, las penas tienen esa mezcla. El temor que siempre acecha.

    SAL: Además del quitapenas llevále un abrazo enorme, el cariño de los amigos es lo mejor que hay sobre todo para pasar el pésimo momento. Hay que tratar de ponerle onda a la situación por más difícil que sea y muchas veces el humor es una excelente salida.
    Si si, buenísima la nueva entrada del blog, celebro el regreso.

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  5. Y SEGURAMENTE QUE ES AHI DONDE TENIA QUE ESTAR, YA QUE CADA ENCUENTRO CASUAL ES UNA CITA...

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  6. Gracias Rochitas y totalmente de acuerdo con los encuentros poco casuales. Un abrazo

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