miércoles, 3 de febrero de 2010

¡¡¡Guarda!!!


Todas las mañanas con la misma energía, una sonrisa y la seguidilla de comentarios que deleitan a los pasajeros.
Una chica sube con el novio y nuestro guarda le explica: “Mi amor, la cartera para adelante, quiero irme tranquilo a casa sabiendo que a vos no te falta nada”. Ruido a silbato y “Arriba muchachos que nos vamos”.
Un joven se para al lado de la puerta así que cuando va a abrir grita con tono nostálgico “Hijo, hijo querido, corréte, dale”.
Un hombre sube en Castro Barros con una bolsa de plástico llena de cosas, le cuesta avanzar entonces le dice: “Deme el bulto señor que se lo cuido” (risas) agarra la bolsa y la pone en el asiento que está reservado para que se siente mientras se ocupa del cierre y la apertura de puertas.
Llegando a Plaza Miserere advierte “Mamitaaaa que miedo y todavía no llegamos…”. Pero al llegar a la estación sube muy poca gente así que le preguntan qué pasó que no fue tan traumático “el tren fantasma no llegó...”.
Pero a veces el pasajero no tiene buena suerte y viaja con ella, la guarda quejosa que en la misma atención Miserere grita indignada: “No están en el Sarmiento, no me traben las puertas por favorrrr”. Está claro que el tren esta vez sí llego, cuidado que entre las telarañas la bruja se asoma, ¡gritos!
Un promedio de queja por pasajero: “No te duermas al lado de la puerta que me la trabás, estos son subtes muy viejos y nadie los cambia ¿entendés?” , “Abra, abra la puerta por favor”, “Arriba, vamos vamos”, “Acabo de tocar el silbato y te subís igual, ah no….”.

5 comentarios:

  1. Historias del "A"... yo no soy usuario... el "B" es mucho más aburrido!

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  2. me encanta el A!, que genio ese guarda, cada tanto uno se cruza con esos personajes... lamentablemente, más frecuentemente con los otros, la guarda amargada.

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  3. Muy buena descripción!!!

    Hay que tener muchos -¡Guarda! en los viajes metropolitanos!!!!

    Saludos

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  4. Nunca lo encontré,ahora voy a estar más atenta! Parece muy divertido este señor.
    Besos!

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  5. Agustín: El A tiene mucha onda, la culpa la tienen esos vagones antiquísimos y estos guardas jejej.
    SAL: Y si, la mala onda abunda pero por suerte siempre hay algún cómico.
    ¡Muchas gracias 1600!, un abrazo.
    Jota: Fijáte que es petiso, peladito. Cuando me pasó esto tuve que cambiar de vagón en Primera Junta porque no salía y cuando me voy a subir al otro tren noto que estaba repleto pero al ver al guarda dije, me subo, total, me voy a divertir y no me equivoqué.

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